lunes, 16 de junio de 2008

Biomagnética – Develemos la incógnita

Qué es la Terapia Biomagnética?

La terapia biomagnética es una técnica segura, no invasiva y ha sido utilizada por muchas culturas para aliviar el dolor. Los bioimanes pueden reducir la inflamación y liberar al organismo del ácido láctico y otros deshechos orgánicos. Sus efectos benéficos se observan prontamente en casos de migrañas, sinusitis, insomnio, problemas digestivos y musculares.

En 1987, la Organización Mundial de la Salud reconoció la terapia con imanes como un método natural y efectivo - si son aplicados en condiciones de máxima seguridad. Se recomienda la consulta al profesional idóneo quien se encargará de indicar el tipo de materiales, las potencias y los tiempos que corresponden a cada caso.

Millones de personas en todo el mundo utilizan la Terapia Biomagnética – aplicación local de pequeños bioimanes sobre el cuerpo - para liberarse del dolor, mejorar la circulación y estimular sus endorfinas.

Sabemos que algunos detractores afirman que se trata de un efecto placebo. Sin embargo, hace mucho que se tiene noticias sobre una investigación llevada a cabo por la NASA, en su intento de conocer la causa por la cual los astronautas regresaban a la tierra, sintiéndose enfermos y debilitados. Llegaron a la conclusión de que se trataba de síntomas de abstinencia, por la carencia de magnetosfera terrestre, tan necesaria para que la sangre se oxigene y circule libremente. Para corregir el problema, los imanes de campo estático – aquéllos que conservan sus propiedades magnéticas, sin necesidad de cables o enchufes - fueron colocados tanto dentro de la nave como en el interior de los trajes espaciales, con un resultado que impresionó al mundo científico.

Los investigadores informan que la acción de la Terapia Biomagnética se explica por el efecto atracción- repulsión de partículas cargadas eléctricamente (positivas y negativas). Tiene acción sobre los iones en el torrente sanguíneo, lo que mejora el flujo de sangre y la llegada del oxígeno a las zonas afectadas.

Existen falsos supuestos acerca de la Terapia Biomagnética. Por falta de asesoramiento adecuado, alguien puede confundirse y creer que llevando una pulsera magnética, se aliviarán sus dolores. Los biomagnetos para el dolor funcionan como una terapia sistémica - para producir efectos terapéuticos en una articulación, hace falta aplicarlos en forma local y también en las zonas asociadas a la misma. Las pulseras y collares magnéticos tienen cualidades propias que serán tema de otra nota, aunque es necesario dejar en claro que han de usarse con cierto cuidado pues permanecen en contacto con venas y arterias. Sugerimos consultar con un profesional idóneo antes de utilizarlos indiscriminadamente.

Las tres variables fundamentales que intervienen en la Terapia Biomagnética son la fuerza y el tipo de material de los bioimanes elegidos, la aplicación del biomagneto en el lugar adecuado y el tiempo de permanencia en dicho sitio.

Para obtener resultados efectivos, los bioimanes son aplicados a nivel local y hace falta dejarlos las 24 horas, durante 6 días consecutivos y luego realizar el seguimiento para evaluar si hace falta continuar el tratamiento.

Los bioimanes adhesivos pueden aliviar la rigidez de cuello, el dolor de cintura y de todas las articulaciones. Los biomagnetos aplicados en su cuello, corrigen la rigidez, vencen contracturas y cefaleas tensionales.

Se puede dormir, bañarse en la pileta, ducharse con los biomagnetos pues se mantienen en su lugar. Cada pocos días, se recomienda visitar al profesional para un cambio del adhesivo y mantener los controles periódicos que son la base del éxito del tratamiento