lunes, 16 de junio de 2008

Magnetoestática – Imanes en la Terapia del Dolor

Una medicina poco difundida por desconocimiento de sus virtudes

La magnetocinética nos da la clave de porqué los imanes permanentes actúan en la terapia del dolor. Hay un amplio uso de la aplicación de imanes en magneto acupuntura y magneto auriculopuntura, según la cual el campo norte produce relajación, mientras que el campo sur genera estimulación, pero sin que nadie explique porqué. Esta aplicación a ciegas es lo que ha determinado que el uso de los imanes sea considerado como un tema propio de medicinas marginales, que se toleran porque son inocuos y funcionan como efecto placebo. El carácter de campo estático resta credibilidad, ya que en todo en lo investigado, las frecuencias del campo resultan un aspecto esencial de los estudios de laboratorio.

Terapia Biomagnética en el dolor

El tratamiento del dolor mediante la aplicación de imanes permanentes del más diverso tipo está ampliamente difundido en la literatura, con descripciones de las empresas comerciales, que disponen de plantillas para magneto reflexoterapia, colchonetas, almohadillas, collares, pulseras, etc. Lo presentan como una prolongación de la terapia biomagnética, pero sus formatos no permiten una colocación exacta de los imanes pues la correcta combinación de las polaridades es lo que determina efectos predecibles.

La profundidad del campo magnético permanente

Excepto en pacientes con obesidad mórbida, en los que es más difícil que el campo de los imanes llegue hasta donde se requiere, se obtienen buenos resultados, siempre que se tenga claro el cómo y dónde han de ser colocados los imanes. En casos de personas con sobrepeso, se aplican imanes de mayor penetración de campo.

Esta información también está publicada, a partir de los estudios realizados por equipos de investigadores, entre los que cabe destacar al grupo del Holcomb Medical Research Institute en la Universidad de Vanderbilt en Tennesse, Estados Unidos.

La idea básica es que la capacidad de los imanes permanentes para calmar o resolver el dolor se basa en lo más o menos pronunciado del gradiente de su campo. El concepto físico de gradiente no es sino la rapidez de la variación con el espacio o la distancia.

En términos de campo gravitatorio, el gradiente de la superficie de una carretera es la forma correcta para describir lo más o menos pronunciado de su pendiente. Un terreno llano tiene un gradiente gravitatorio cero, una cuesta ascendente tiene un gradiente gravitatorio positivo, y una cuesta descendente tiene un gradiente gravitatorio negativo. El gradiente de una cuesta suave se representa por un número bajo (positivo o negativo, según corresponda), y a una cuesta empinada le corresponde, como gradiente, una cifra alta (también positiva o negativa).

Los gradientes de campo magnético con imanes se logran fácilmente en la práctica asociando o agrupando pequeños imanes. Es muy fácil de entender imaginando un plano conformado por un mosaico de pequeñas piezas cuadradas, que en realidad son imanes permanentes. Si todos los imanes tienen la cara negativa al exterior, la superficie equipotencial (la gráfica tridimensional del valor del campo en función de la distancia en el plano horizontal x-y) será un casi plano (más próximo a un plano cuanto más pequeñas sean las piezas) horizontal, con pequeños hundimientos en los vértices de las mismas. Si todas estuvieran colocadas con su cara positiva al exterior, la situación sería idéntica, pero con la superficie equipotencial poseyendo un valor opuesto. Si se dispone un mosaico en ajedrezado, es decir, con polaridades norte-sur alternativas de modo similar al tablero de ajedrez, la superficie equipotencial saltaría de una cara a otra, tomando la forma de protuberancias en altorrelieve y en bajorrelieve. Estaríamos con un sistema que produce un campo de capacidad terapéutica incrementada.

Nos encontramos así con la imagen que se necesita para utilizar adecuadamente los imanes en los tratamientos. Lo más frecuente es trabajar a cuatro o a cinco puntos, es decir, con cuatro o cinco imanes colocados con una configuración alternada de los polos.

A la luz de estas ideas es posible entender algo tan fascinante como es el hecho, avalado por la práctica de que un polo negativo tenga el efecto fisiológico opuesto al de un polo positivo, siendo realmente lo mismo, aunque con sentido opuesto.

Si suponemos que la piel es una superficie equipotencial plana, al adjuntarle un imán se le produce una protuberancia en relieve o en bajorrelieve, es decir, una zona con gradiente positivo o negativo. Es decir, incrementamos o subimos la potencialidad de las reacciones químicas.

Los tropiezos de un conocimiento muy joven

Cuando intentamos hacer una reseña del desarrollo del biomagnetismo en el campo de la salud, es necesario puntualizar que empieza con un malentendido. Hace algún tiempo, se creyó que la corriente impuesta con generadores artificiales propiciaba el crecimiento óseo. Después se vio que el campo magnético era estimulador, y mucho más cómodo por su carácter «no invasivo», y se acuñó el término acoplamiento inductivo.

El malentendido se inicia al creer que los impulsos magnéticos de campo, por una inducción similar a la que tiene lugar en una dínamo, generan una bioelectricidad y que por efecto de la deposición galvánica de estas corrientes, se incrementan los depósitos cálcicos. Actualmente, se sabe que esto es incorrecto. El campo magnético es la causa, y la bioelectricidad es el efecto.

En lo que respecta a la terapia del dolor, cuando dos imanes en polaridades opuestas (campo magnético de atracción) son aplicados en la zona dolorida, se genera una corriente que impulsa la salida de los deshechos tóxicos acumulados y estimula suavemente los vasos sanguíneos para producir una analgesia endógena.

El biomagnetismo y las pilas vivientes

El metabolismo equilibrado depende del pH (grado de acidez/alcalinidad de los fluídos corporales) y ello convierte a los seres vivos en una pila viviente. La descarga de la pila mediante corrientes bioeléctricas se llama Vida. El biomagnetismo es una herramienta esencial que actúa sobre el centro de la vida.

Texto extraído de los apuntes de clases del Instituto Azulcamet de Biomagnetología

Sistema Azulcamet en Biomagnética

Directora: Graciela Pérez Martínez

Investigadora y Comunicadora

Docente en Física del Magnetismo y Biomagnetoterapia